ACTUALIDAD | Nuevo informe de Michelle Bachelet ratifica graves consecuencias para el Estado de derecho y la democracia en Venezuela
El documento hace hincapié en la negación de justicia, persecución a la disidencia, torturas, impunidad, entre otros.
Un nuevo informe sobre Venezuela en el cual se denuncia las torturas graves, desapariciones forzadas y la falta de acceso a la justicia usando el Covid-19 como excusa, publicó este martes Michelle Bachelet, alta comisionada de la Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh).
El Acnudh documentó varios factores que socavan la independencia del Poder Judicial, en particular, la inseguridad en la titularidad de los jueces, la inexistencia de un proceso transparente para su designación y la presión política que se ejerce sobre ellos, tal como ha denunciado Justicia, Encuentro y Perdón en innumerables ocasiones.
Dentro del nuevo informe se reseñan múltiples violaciones de los derechos humanos causadas por la falta de independencia del máximo órgano judicial del Tribunal Supremo de Justicia, los demás tribunales y los fiscales del Ministerio Público con graves consecuencias para el Estado de derecho y la democracia.
En el informe se documentaron 16 casos de tortura o malos tratos ejecutados, entre junio de 2019 y mayo de 2020, realizadas por fuerzas de seguridad del Estado. «El número real podría ser significativamente más elevado en vista de los patrones de desapariciones forzadas por un breve periodo de tiempo, detenciones arbitrarias y prisión incomunicada, los cuales suelen aumentar el riesgo de tortura y malos tratos», refiere el documento.
En este orden, la Acnudh señaló que recibió información en la que se denunciaba que las personas privadas de libertad por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) fueron sometidas a sesiones que involucraban tratos crueles, inhumanos o degradantes, ejecutados durante su interrogatorio. Los casos documentados hacen referencia a fuertes palizas con tablas, asfixia con bolsas de plástico y productos químicos, inmersión de la cabeza del detenido bajo el agua, descargas eléctricas en los párpados y violencia sexual en forma de descargas eléctricas en los genitales. Asimismo indican que los detenidos estuvieron expuestos a bajas temperaturas, luz eléctrica constante, esposados, ojos vendados durante largos períodos, además recibieron amenazas de muerte contra ellos y sus familiares.
Con información de El Universal y Prensa de Lara
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