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Boletín #48 – Lo que importa para Venezuela después de la visita de la Fiscalía de la CPI

Editorial

Sin duda alguna el 3 de noviembre de 2021 quedará registrado como una fecha histórica en Venezuela, en suelo venezolano se anuncia el inicio de una investigación por parte de la Fiscalía de la Corte Penal Internacional por la presunta comisión de crímenes de lesa humanidad en nuestro país. Más allá de todos los análisis que respecto a este acontecimiento puedan hacerse, más allá de describir el inmenso reto que esto supone y el control de expectativas que en torno a ello deba hacerse, lo destacable para nosotros es la esperanza convertida en certeza, luego de este evento la justicia dejó de ser un concepto abstracto e inaccesible, ya no es la utópica pretensión de las víctimas – incluída la sociedad – es la concreción de las luchas incansables y determinadas de víctimas y defensores, es la ratificación de la perseverancia como instrumento para alcanzar los objetivos más nobles. Y es eso, lo que queremos destacar, son las víctimas quienes han convertido su dolor en impulsor de estos procesos y es su dolor también el que se ve resignificado y dignificado, es este avance a la justicia su logro y será la justicia su legado.

Este evento es sobre todo aliento para el porvenir, ese que se lucha a diario sin desmayo en medio de una cotidianidad adversa, peor aún, en un día a día que suma dolor aun en momentos en los que una sociedad noble intenta – una vez más – impulsar cambios que mejoren sus condiciones de vida, para entender esto basta confrontarse a episodios dramáticos que – aun luego de este anuncio – se siguen sucediendo, lo que nos deja claro que ni siquiera una investigación formal ha puesto freno a la violencia política, tal es el caso de la muerte de un ciudadano mientras hacía fila para ejercer su derecho al voto, momento en el que civiles abrieron fuego contra los votantes, sembrando el terror y manchando de sangre la esperanza de quienes insisten en el ejercicio de la ciudadanía como mecanismo de solución a nuestros tantos conflictos. JEP pudo conocer la historia de voz de sus víctimas y al respecto solo diremos que es una nueva historia de dolor que desgarra a otra familia venezolana que se queda sin hijo, sin esposo, sin padre. Esto suma, sigue sumando a una investigación que no se hará respecto a un pasado lejano, a un conflicto dejado atrás y cuyas heridas pretenden sanarse, penosamente se hará en torno a un presente que urge cambiar.

En medio del aliento y el golpe al pecho que lo limita, el compromiso es seguir, tomados de la fuerza de las víctimas, en trabajo colaborativo con todas las organizaciones de la sociedad civil, con el reto de ser mejores y ser merecedores del país que estamos comprometidos a reconstruir.

  

Martha Tineo 

Coordinadora General Justicia, Encuentro y Perdón

 

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30/11/2021

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